PRINCIPALES DATOS
CATEGORÍA: Fuentes
COORDENADAS: 41.6148351 / -0.9146133
PROVINCIA: Zaragoza / COMARCA: Comarca Central
LOCALIDAD: Zaragoza
COMO LLEGAR:
La Fuente de La Junquera se encuentra en un meandro del río Huerva, en su margen derecha, a escasa distancia del núcleo urbano de Zaragoza. Para acceder a la fuente, tomamos el Camino de la Fuente de La Junquera, que nace junto al Canal, precisamente en la intersección de éste con el río Huerva. Seguimos por este camino que remonta el río Huerva por su margen derecha y, a unos dos kilómetros, llegamos a la Fuente de La Junquera, situada a la derecha del camino, junto al río.
SITUACIÓN ACTUAL:
El entorno de la Fuente de la Junquera se incluyo en un parque que construyo el ayuntamiento de Zaragoza en el entorno del río Huerva en esta zona. La fuente está urbanizada que conserva un caño antiguo y tiene añadido uno moderno del que se puede recoger agua. Según la literatura presenta una cierta contaminación por nitratos, probablemente de origen agrícola y potenciada por el menor caudal, pero en el cartel que existe en la actualidad (2024) no indica que el agua no sea potable. La progresiva urbanización de la cuenca receptora de La Junquera ha provocado que la fuente mane escasamente solo 2 litros por minuto.
GEOLOGÍA:
La fuente mana de un talud de unos cuatro metros, proviniendo sus aguas del barranco homónimo de La Junquera, que desciende desde los Montes de Torrero. En otro tiempo, el agua formaba un arroyo antes de llegar al río. El agua en su recorrido disuelve yesos del Terciario que incorpora a su composición produciendo un agua sulfatada cálcica.
Cámara Niño, F. en 1948 apunta que el agua aflora a una temperatura de 14-16ºC, con un pH entre 6 y 7 y que es un agua sulfatado cálcica, predominando sobre todo el sulfato cálcico junto al sulfato magnésico, con algo de sulfato sódico y sin cloruro magnésico, dando un residuo seco de 3,15 gr/l. El caudal es variable según las precipitaciones: entre 4 y 7 litros por minuto. Medidas de la Confederación Hidrográfica del Ebro que citan Iturbe, F. y Ruiz Solans en 2008 dan una composición similar, aunque con menor concentración del sulfato magnésico y mayor del sódico, con variaciones temporales, por ello la califican de sulfatado cálcica y a veces sulfatado cálcica sódica. Y también se detecta una contaminación de cierta importancia por nitratos. El caudal en 2008 era mucho menor, consecuencia de la cada vez mayor urbanización de la cuenca receptora, con unos valores menores a 2 litros por minuto.
HISTORIA:
Antonio Lausín, vecino de la zona, refiere que el manantial estaba en un campo propiedad de su padre (Manuel Lausín) pero que a principios de los años 40 una fuerte riada del Huerva erosionó la orilla dejando el talud con la fisonomía actual y dejando a la fuente dentro de la zona de cauce, pasando por tanto a titularidad pública. Antonio recuerda en los años 40 y 50 filas de decenas de personas para beber el agua e incluso recogerla, aunque indica que se decía que no se podía conservar pues perdía sus propiedades (Iturbe, F. y Ruiz Solans (2008).
Estos mismos autores apuntan que la mayor popularidad de esta fuente se alcanza a mediados del siglo XX como zona de esparcimiento, aunando las propiedades medicinales del manantial con un entorno placentero: el propio río y las amplias olmedas de la ribera en todo el entorno. La zona va quedando en paulatino abandono y con una progresiva urbanización. Se produce un primer acondicionamiento en 1911 gracias a una donación de D. Pablo Teller, de la que hay una placa sobre el manantial. A comienzos de este siglo XXI comienza el proyecto de acondicionamiento de la fuente y su entorno que es como se puede observar en la actualidad
BIBLÍOGRAFIA:
Iturbe, F. y Ruiz Solans (2008). Fuentes de Zaragoza curativas. Ed. Ayuntamiento de Zaragoza
Cámara Niño, F. (1948). Aguas minero- medicinales de Zaragoza. Revista de la Academia de Ciencias Exactas, Físico-Químicas y Naturales. Serie 2a, T. III, 85-106.