Sotarraña

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PRINCIPALES DATOS

CATEGORÍA: Minas

COORDENADAS: 42.2698954 / 0.0118083

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PROVINCIA: Huesca / COMARCA: Sobrarbe

LOCALIDAD: Bárcabo / Bertoz

MINERALES: Oligisto,

COMO LLEGAR:

La cavidad analizada se encuentra entre los barrancos del Puntarrón y Basender. Se accede por la pista de acceso al monte Asba, que se inicia en el núcleo urbano citado. A unos pocos cientos de metros del comienzo, se abandona la pista en la confluencia de una pista lateral, tomando una senda poco marcada, utilizada por cazadores, entre bancales calizos.

SITUACIÓN ACTUAL:

Se encuentra bajo una encina de dimensiones medianas que esconde la entrada. Aparece rodeada por una rampa semicircular ascendente que parece material de escombrera del interior. Hay un bloque desprendido en medio de la boca, lo que denota un claro riesgo de hundimiento. La sala contiene dos pequeñas pilas de piedra que recogen agua de goteos de agua del techo y que le dan el calificativo de fuente con el que aparece en los mapas

GEOLOGÍA:

Aparentemente se trata de un yacimiento estratiforme. El oligisto y la limonita aparecen de aspecto terroso y concentrado en dos bolsadas. Posiblemente por el contexto geológico se tratará de mineralizaciones diagenéticas.

HISTORIA:

Se trata de una cueva con historia y podría ser la evidencia más antigua de minería en el Sobrarbe, pero no hay evidencias para afirmarlo, por el momento. Villarroel y Cuchí (2003) hacen un estudio en profundidad de esta cueva, del cual se ha obtenido gran parte de información de esta. Estos autores apuntan que se ha relacionado con brujería y con la presencia de un tesoro en el siglo XIX (Peñart, 1996). En una época desconocida se ha extraído pequeñas cantidades de mineral. El ocre rojizo se ha usado para el curtido de pieles desde el Neolítico. Sin descartar su uso en la prehistoria, las huellas de picado parecen más recientes, por eso Villaroel y Cuchí (2003) apuntan que puedan haberse extraído los óxidos de esta cueva para obtener pigmentos rojos y amarillas, y quizás se hayan usado para pintar las cercanas iglesias de Santa María de la Nuez, Santas Nunilo y Alodia en Bertoz. Posiblemente las roturas que hay en la base de la cueva, donde no afloran los minerales se deba a la acción de los buscadores de tesoros, como hemos apuntando anteriormente. No hay que descartar que la cueva haya sido usada como refugio en la guerra civil, como sucedió con otras cuevas de esta parte de la comarca. Su uso como refugio en diferentes épocas lo sugiere la presencia de silex, cerámica popular e incluso el resto de un colador artesanal realizado con el fondo de una lata.

BIBLÍOGRAFIA:

Villarroel y Cuchí (2013)

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